Nos planteamos un problema: Quiero que hoy me mire todo el mundo, ¿Cómo puedo hacerlo?
Hemos elegido una palabra al azar: Caramelo
Buscamos una relación entre el problema y la palabra:
1. Regalarle caramelos a quién me interese; como por ejemplo, a niños, para que nos miren los padres.
2. Llevar un bolso en forma de caramelo.
3. Heharnos un perfume que huela a caramelo. Así, cuando pasemos al lado de la gente, estemos en la cola del super o en la parada del bus, todo el mundo girará la cabeza buscando la procedencia de ese olor delicioso...
Y ya está solucionado el problema!
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